El Suelo Impresionante De La Basílica
El diseño del suelo marmóreo fue originalmente una propuesta propia de George Grognet de Vassé. La obra fue completada por Mariano Spina, ayudado por Antonio Galea. El trabajo duraba dos años y estaba listo en 1911. Tras la Segunda Guerra Mundial el suelo tuvo que ser restaurado por el daño causado por los escombros cuando una bomba alemana penetró la cúpula. La bomba no se explotó pero al caerse dañó parte del suelo. Cabe mencionar que el diseño del suelo fue planeado para complementar el de cúpula arriba.