La Capilla De San Roque, San Sebastián Y Santa Rosalía

La pintura principal, hecha por Stefano Erardi en 1676, describe a los tres santos que nos protegen contra la peste.

La pintura a la derecha es de Raffaele Caruana, completada en 1868. Describe a San Roque que se encuentra al lado de un hombre infectado por la peste. San Roque nació de una familia noble a principios del siglo catorce en Montpellier en Francia. Cuando murieron sus padres, donó sus bienes a los pobres y tomó el voto de la pobreza. Cuando peregrinaba a Roma, Italia fue golpeada por la peste. Roque curó a muchos infectados al rezar con ellos y al hacerles la señal de la cruz. También fue infectado y se refugió en una cueva.

La pintura a la izquierda fue completada en 1866 y también la obra de Caruana. Esta describe a San Sebastián, un oficial del ejército romano, cuando defendía la fe cristiana frente al emperador. Al ser descubierto por el emperador Diocleciano que fue un cristiano, le condenó a la muerte lanzándole flechas. Sin embargo no murió y fue rescatado por Irene, una pía viuda cristiana. Tras recuperarse, fue a hablar de nuevo a Diocleciano para advertirle de sus pecados. Esta vez el emperador quiso que  fuera apaleado hasta que se muriera.

Los dos bustos de mármol en esta capilla son de Angelo Gatt, el contratista de esta basílica, del caballero Carmelo Dimech, un gran bienhechor de esta iglesia.